lunes, 31 de diciembre de 2007

Los niños índigo, ¿Una nueva raza?

Dicen que una nueva raza de humanos empiezan a poblar la tierra.

Los denominados "niños índigo" comienzan a sonar en nuestros oídos a finales de los años 80, hoy, es un clamor entre muchos sectores de la sociedad, incluidos una pequeña parte de educadores que se suman a la corriente de aceptar a estos niños "especiales" entre sus alumnos.

De una manera lo más objetiva posible vamos a intentar explicar qué características poseen estos niños, y la forma en que se comportan. ¿Cómo reconocer a un niño índigo?

Lo primero es aclarar de dónde viene su nombre. La doctora Nancy Ann Tappe en el año 1982, publica un libro llamado "Understanding your life through" donde hace un estudio que denomina: "los colores de la vida", y afirma que las personas se clasifican en función del color de su aura (color que cada ser humano desprende de forma invisible y que se capta con una cámara especial). Este color, determina las características emocionales y la personalidad del individuo. Los niños índigo poseen un aura de tonos azules y añiles (de ahí su nombre) nunca vista hasta entonces, y desde su descubrimiento, afirma que ha crecido de forma espectacular.
Pero es en 1999 cuando este tema adquiere su mayor dimensión, con la publicación del libro "Los niños Índigo" de Lee Carroll y Jean Tober, tras el cual, muchas personas creen reconocer en sus hijos, sus alumnos o sus pacientes a estos niños. Se generaron entonces una serie de estudios, (dudosamente serios y contrastados) y conferencias para tratar estas teorías. Se escribieron líneas y líneas a cuenta de los niños índigo.

La gran parte de la comunidad médica, considera a estos niños como hiperactivos o con desordenes de atención (ADD Attention Deficit Disorder), pero las personas que creen en la teoría de la doctora Tappe, asocian a estos niños con una nueva raza, más avanzada y que viene a dar un giro a la población mundial, donde ya cuentan con cientos de miles de estos niños.
Socialmente son niños inadaptados. Con problemas de disciplina. No soportan las normas sociales ni las actividades que carezcan de una parte creativa importante. No se sienten cómodos entre personas diferentes a ellos.
Otra parte destacada de su personalidad es la espiritual. Niños dotados de una excepcional capacidad auditiva, incluso capaces de escuchar su propio flujo sanguíneo. También capaces de percibir "presencias fantasmales" y manejan a la perfección habilidades de adivinación y telepáticas.

Son niños con una gran autoestima y seguridad en sí mismos. Se creen superiores, y así lo manifiestan tanto en palabra como en obra. Duermen pocas horas y demuestran también una inteligencia superior al resto de los niños de su edad.
Ellos saben de su misión en la tierra. Que desarrollarán en su madurez.
Se clasifican en cuatros clases de personalidad, estas son:
El humanista (elegirá siempre carreras sociales como abogados, médicos profesores y políticos del mañana). El conceptual (físicamente más atlético y elegirá carreras como astronauta, ingenieros etc.) El artista (más sensible menudo físicamente. Serán los próximos pintores y artistas del futuro). Por último, está el índigo Interdimensional que es físicamente el más grande de todos. Niños que con pocos años no admitirá ni una crítica ni un consejo. Frases como "Ya lo sé" son constantes en su relación con los demás. Son fanfarrones y peleones. Serán los próximos líderes espirituales del mundo.

Todos ellos suelen ser problemáticos socialmente, y si en su familia no son comprendidos y guiados de manera adecuada, pueden llegar a convertirse en peligrosos delincuentes.
Estudios no contrastados afirman que poseen un sistema inmunológico superior al resto de la humanidad, haciéndoles resistentes a enfermedades tan graves como el cáncer o el sida.

Los niños índigo nacen, no se hacen. Sus características físicas coinciden también entre ellos, éstas son: delgados, la frente algo abultada, ojos grandes y profundos y manos de dedos largos y delgados. Comen poco y muchos de ellos son vegetarianos, por no soportar la carne. Lo más curioso es que la mayoría son zurdos.
Se dice que fueron niños índigo: Albert Einstein, Leonardor da Vinci, Mozart ...

Tal vez creas tener
en tu entorno, incluso en tu familia un niño Índigo. Si es así, (siempre según esta creencia) estás de suerte, aunque educar a un miembro de esta nueva raza no es tarea fácil, pero dicen que son niños extremadamente cariñosos y con un futuro muy relevante en nuestro mundo. Vienen a eliminar la infelicidad de la tierra y a construir una nueva generación de humanos abocados al entendimiento y la armonía. Sería hermoso ¿no?

Un saludo desde la oscuridad.
Feliz 2008.

lunes, 17 de diciembre de 2007

Los grandes monstruos (leyendas aún vivas).

Curiosamente, en nuestros días, en pleno siglo XXI, cuando la tecnología nos abruma, los niños juegan con juguetes electrónicos, que hace unos años ni siquiera imaginábamos... Los grandes monstruos de la historia siguen vivos.
Esos monstruos de los que se lleva hablando siglos. Otras cosas pasan de moda, quedan en el olvido, o simplemente, la ciencia las supera.
La visión de estos monstruos que veremos a continuación, sigue vigente hoy en día. Lo que ocurre es que no es noticia de primera página, pero sigue habiendo avistamientos de Ovnis, y avistamientos de criaturas que todos conocemos.

Las primeras criaturas a las que quiero referirme son los grandes monstruos marinos.
Existe un relato que el padre misionero Paul Egede dejó escrito en su viaje cruzando las frías aguas de Groenlandia. No estaban heladas puesto que era el 6 de julio del año 1734. El padre estaba apoyado en la barandilla de cubierta, contemplando el horizonte, con la mirada perdida en ningún lugar. Todo era tranquilidad y quietud, cuando de pronto, al llegar al grado 64 de latitud Norte, un movimiento brusco sacudió el barco, un violento chapoteo hizo aparecer ante sus ojos, un monstruo. Un animal increíblemente espantoso, de una altura tal que su cabeza parecía llegar más arriba de la cofa del barco. Salió una segunda vez y su aliento no era tan violento como el de una ballena. Dice en su relato: "tenía la cabeza mas estrecha que el cuerpo y parecía blando y lleno de arrugas. Tenía unas patas muy anchas y colgantes. Después venía una cola muy larga, de mayor longitud que la proa de un buque".
Con esta descripción es difícil averiguar qué tipo de animal describió este hombre. Pero, sin lugar a dudas, se trataba de un animal enorme y nunca visto antes.
Años más tarde, en 1746, el gobernador de Bargen, Lorenz von Ferry, confirmó oficialmente las declaraciones de dos marineros que aseguraban haber visto muy cerca, en una zona próxima a la costa, una serpiente marina de 35 metros de largo, provista de una cabeza que hacía recordar la de un caballo.
Todavía hoy, hay avistamientos de grandes animales marinos, que no son ballenas. Calamares gigantes,y otras criaturas que hoy, sabemos que existen ya que se han pescado algunos ejemplares. Valga destacar el caso del calamar gigante que puso en un trance difícil a los tripulantes del barco "Alecton", cerca de la isla de Tenerife, en el mes de noviembre de 1861. Tenía un cuerpo de 6 metros y larguísimos tentáculos de 40. Su fuerza era impresionante. No debía pesar menos de 25.000 kilos.

Lo que el mar esconde
no lo sabemos. Esa gran masa negra y profunda puede aún reservarnos muchas y desagradables sorpresas.

Como olvidarnos tam
bién de Nessi, el querido (no se muy bien porqué) habitante del Lago Ness. No hay noticias de que nunca haya atacado a nadie, no es violento. Más que asustar, provoca curiosidad y hasta ternura. Pero a pesar de todo es un ser monstruoso, de dimensiones impensables. A veces parece una serpiente. En ocasiones recuerda a los grandes dinosarurios de cuello larguísimo.
La leyenda del lago Ness comienza en 1933. En un principio se creyó que era un bulo periodístico. Una noticia de las que aparecen cuando no hay nada que contar. Pero la inmensa cantidad de documentos gráficos que existen de él hacen dudar de falsedad. Al menos se mantiene a lo largo de los años.
El Lago Ness es una gran falla geológica de aproximadamente 40 km. de longitud por unos dos km. de ancho. En su parte más profunda alcanza del 225 metros.
El lago no posee orillas, puesto que se encuentra encajado dentro de un corte profundo del terreno cuyas paredes descienden casi verticalmente hasta las profundidades. Sus aguas son muy oscuras y frias.
El primer relato que se conoce del monstruo Nessi se debe a una señora llamada Mary Hamilton y ocurrió como digo en 1933. Ella andaba paseando esa tarde primaveral y se acercó a la orilla del lago. Al rato volvió como loca al pueblo contando una fantástica historia. Dijo que había visto nadando en el lago a un animal enorme, que no se parecía a ninguno que hubiera visto antes. Contó que tenía un largo cuello y una pequeña cabeza. Cuando nadaba, sacaba a oleadas parte del cuerpo sobre el agua. Nadaba muy deprisa y debía medir unos 80 pies.
El Diario Daily Mail publicó la noticia del monstruo el 20 de mayo de ese año.
Desde entonces hasta hoy son cientos, miles las ocasiones en que Nessi se ha mostrado ante los humanos.

En el continente africano hay también leyendas de distintos monstruos (aunque yo diría que se trata del mismo ser, pero con nombres distintos) Estas leyendas no están documentadas. Se recogen verbalmente de tribus cercanas a los lugares en que aparece.
Se trata de un enorme anfibio, cuyas descripciones corresponden a un saurio antediluviano. En Camerún lo llaman Jaco-Nini. Cerca del lago Victoria, su nombre es Lukwata y en las orillas del Nilo se le lama Lau. Dicen que es herbívoro y mata a los cocodrilos e hipopótamos pero no se los come. Se habla también de unicornios, osos gigantes, mamuts blancos, serpientes con patas, elefantes de aspecto metálico, dragones y un sinfín de criaturas, que a lo largo del tiempo pasan de generación en generación. Y, de vez en cuando, son vistas de nuevo.

Y por último, cómo olvidar al famosísimo Yeti, Big-foot o abobinable hombre de las nieves. Todos hemos oído hablar de él. Aterrorizó a muchas expediciones al Himalaya. Algunos sostienen que se trata de un gran oso peludo, pero algunas huellas encontradas y testimonios de su comportamiento, hacen que los expertos no crean en esa teoría.
También ha sido visto en formaciones montañosas de China.
Eric Shipton y Mike Ward, acompañados del sherpa Tennsing, lograron fotografiar unas huellas recientes de un Yeti, a 6.000 metros de altura, en la cumbre del Menlun Lá. El ser había pasado por allí hacía pocos minutos según el sherpa. Las huellas medían 29 por 14 cm. y las siguieron durante más de un km. por un glaciar. Éstas llegaban hasta una gran grieta en el hielo, y proseguían, después de un gran salto, al otro lado.
Lo más curioso que se cuenta del Yeti es respecto a su comportamiento. Se dice que se comporta como un hombre, que hace escalones en la roca y traza caminos. Fabrica arcos y flechas. Utiliza instrumentos (hace pensar en un gran simio). Su altura está entre 1,5 metros y 2,5 metos. La mayoría parece que caminan erectos, aunque cuando corren, en ocasiones se apoyan también en las extremidades superiores.
Este monstruo también ha sido visto en la región Andina en America del sur. En Estados Unidos y Canadá es conocido como Big-foot (pies grandes) y han sido halladas huellas de 40 y 45 cm. y estudiadas en algunas ocasiones en el valle Bluff Creek, en California del norte, en varios lugares de Canadá, en Michigan, cerca de Monroe, en Ontario, en Winsconsin, etc.

Quizá algún día, esta ciencia de la que disponemos nos ayude a descubrir qué se esconde tras estas leyendas. Que tal vez lo son, o tal vez forman parte de la necesidad que tenemos los humanos de creer en cosas inexplicables.

Un saludo desde
la oscuridad.

martes, 4 de diciembre de 2007

La conexión de una mirada.

Hay personas a las que les perdonarías cualquier cosa. Con las que existe esa conexión invisible, sin palabras, sin contacto físico. Solo una mirada. Una simple mirada basta para conectar.

Los animales y los niños poseen ese sexto sentido frente a los demás seres humanos. Y conectan entre ellos de forma fantástica. Siempre observo a mis gatos y cómo reaccionan frente a una visita. A veces se acercan, confiados. Huelen tranquilos al extraño, dan media vuelta y se tumban a dormir en la misma habitación. Otras, sin embargo, llegan al cuarto con el rabo inflado, bordean de lejos a la visita y poco después, marchan a otra estancia a dormir. Curioso ¿No?
Con los niños o los bebés ocurre algo parecido. Hay personas que les provocan "buen rollo" y les hacen reír. Otras producen un estado de desasosiego difícil de entender.
Es significativo que estos seres, que no son capaces de comunicarse verbalmente con su entorno, si sean capaces de captar otras cosas. Esas cosas que los adult
os ocultamos por miedo a expresar que este o aquel no nos gusta. Sin motivo. Con estas personas cualquier afrenta es la excusa perfecta para no perdonar jamás. Y no hablo de lazos afectivos, ni de la gota que colma el vaso, ni nada por el estilo.
Es una aversión incontrolable, que saca de nosotros lo peor. Los sentimientos mas oscuros residen en el fondo o en la superficie de cada uno. Hay seres que nos rodean capaces de aflorar lo peor de nuestro corazón, esa parte diabólica que todos tenemos, ese psicópata que todos llevamos dentro.

Otros congéneres nos obsequian con paz. Una paz que viene sola, que fluye a través de algunas personas y que te llega. Con su sola presencia te sientes bien, tranquilo, a gusto. Tampoco hablo esta vez de sentimientos, ni amor ni nada por el estilo.
Muchas cosas influyen en nuestra visión de los demás. El color de sus ojos, la forma de su cara, su olor imperceptible, la forma que tiene de moverse o de escuchar...

A veces conoces a alguien y presientes que algún día, en algún momento de la jugará, te hará una faena. Yo rara vez me equivoco. ¿Sexto sentido? ¿intuición? no lo sé, pero no soy la única persona a quien le ocurre.

El tema está en si debes dejarte llevar por esa primera impresión. No dar oportunidades a personas que pasan por nuestra vida y tal vez serían valiosas si les dejásemos acceder a nuestro corazón. Dar una oportunidad. ¿Y hacerte vulnerable?
Un saludo desde la oscuridad.